Construida con piedra volcánica de la zona, Casa Enso es una hermosa casa brutalista con un twist a la mexicana.
- arkimiaestudio
- 22 jun
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La montaña que se eleva a sus espaldas fue lo primero que llamó la atención del arquitecto Rogelio Vallejo Bores cuando visitó el lugar con su equipo. Una pareja de ancianos, ella con raíces mexicanas y él con raíces turcas, encargó a los arquitectos de HW Studio que crearan para ellos un retiro lejos de la civilización mientras durara la pandemia.
Los muros de piedra de la "Casa Enso" apenas se aprecian en su entorno arenoso. Solo cuando el sol está bajo, de la casa brutalista de piedra nacen amplias sombras que se despliegan sobre el suelo seco de la naturaleza que la rodea


El estado de Guanajuato está situado en el centro de México, con las costas del Pacífico y del Golfo a cientos de kilómetros. La región que rodea la capital del mismo nombre, situada a más de 2 mil metros sobre el nivel del mar, alberga una piedra natural especial en la que se basa una larga tradición constructiva. La casa brutalista bajo la montaña pretendía basarse en esta tradición y "promover un diálogo respetuoso entre el nuevo edificio y su entorno", afirma Vallejo Bores. Sin embargo, la elección del material no solo se basa en el sentido de la tradición, sino también en el hecho de que la piedra se extrae en los alrededores, está disponible y los oficios locales saben cómo procesarla.



Dos muros de piedra dispuestos en cruz dividen la parcela de una hectárea en cuatro zonas, a cada una de las cuales los arquitectos asignaron una función. El primer cuadrante sirve de jardín delantero, una especie de zona de entrada con jardín. El segundo cuadrante ofrece espacio para los coches, que encuentran sombra bajo las huesudas acacias. En el tercer cuadrante, los arquitectos construyeron la casa brutalista propiamente dicha, que combina salón, dormitorio, vestidor, cocina y baño en una sola planta. Tanto en el salón como en el dormitorio, el cubo de piedra se abre a una generosa fachada acristalada. El estudio del cliente está situado en el cuarto cuadrante. El edificio independiente es el único elemento que sobresale por encima del conjunto y, según explica Vallejo Bores, se inspiró en los altos hornos de piedra de la antigua mina de Santa Brígida, situados en el cercano pueblo de Mineral de Pozos.


La estructura geométrica del conjunto lleva de forma natural a los residentes a moverse constantemente entre las distintas zonas. Hay un cambio constante entre el interior y el exterior, con los caminos lineales que recuerdan a los claustros de un monasterio y el efecto meditativo de caminar. "Queríamos crear un lugar que enmarcara el paisaje y al mismo tiempo formara parte natural de él", dice Vallejo Bores.

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